Páginas

28 de julio de 2012

Flora del paseo del Muro de San Lorenzo. 5- Parque del Rinconín.

Se encuentra a un paso del Sanatorio Marítimo y prefiero dar este saltito a la última zona ornamental antes de continuar en el paseo del Muro, por zona ya de acantilado y con más plantas silvestres, que veremos en los siguientes post.



Los primeros árboles que encontramos son las palmeras mejicanas (Washingtonia robusta)  en una hilera paralela a la cordiline de australia y en otra un poco más arriba.















La palmera canaria  (Phoenix canariensis) también está presente,























así como grandes ejemplares del taray (Tamarix africana),































arbustos muy desarrollados de pitosporo del Japón (Pittosporum tobira), que también hacen de seto,















otros de siempreverde (Myoporum laetum),




























varios de hebe (Hebe "Wiri Charm"),


































y formio (Phormium tenax).














































 Árboles conocidos son el eucalipto (Eucalyptus globulus)

















y el pino piñonero (Pinus pinea)

















También están plantados algunos originales, como el ombú (Phytolacca dioica)








la yucca (Yucca aloilifolia)















y  4 jóvenes ejemplares de drago (Dracaena draco).

















Los espacios con césped son amplios. Además de alguna de las flores silvestres ya señaladas en los post anteriores del paseo, encontramos otras nuevas cuando tarda en pasar la segadora: margarita africana (arctotheca calendula),









el diente de las peñas (Leontodon taraxacoides),
















alfalfa lupulina (Medicago lupulina),





















la hierba de las heridas (Prunella vulgaris),



















trébol rojo (Trifolium pratense) que no cité, pero también he visto en zonas anteriores del paseo,













el llantén menor (Plantago lanceolata),



















una gramínea invasora, el pasto miel (Paspalum dilatatum)



cola de ratón (Hordeum murinum),




















la manzanilla loca (Anacyclus clavatus),















el dáctilo (Dactylis glomeratus), 



















la romaza (Rumex pulcher),














el rábano de mar (Raphanus raphanistrum),
















la grama común (Cynodon dactylon), con todas las espiguillas emergentes de un mismo punto,












la verbena (Verbena officinalis),
























la coniza (Conyza sumatrensis),





















la viborera (Echium vulgare)





















el mastranzo (Epilobium parviflorum),
el pan de cuco (Oxalis corniculata)





el cordoncillo (Polygonum arenastrum),












una paniega, bastante seca (Rumex conglomeratus),





















la cerrajilla (Sonchus tenerrimus),



















 y dos verónicas, una sin nombre vernáculo (Veronica persica)












y otra llamada borroncillo o verónica arvense (Veronica arvensis), mucho más pequeña y con los pedicelos florales más cortos.

3 comentarios:

César dijo...

Gracias angeles, también me voy sorprendiendo con todo lo que encuentro.

fenixavisunica dijo...

Ojalá las pocas bellas sombras (ombú)que hay en Gijón tuviesen el enorme desarrollo que alcanzan en otros climas, son árboles que no olvidas.

César dijo...

Es cuestión de tiempo, cuando andemos con el cayado...